Desde Battle Serk.
"2 de agosto de 2012
¡NO al SEXISMO!
¡NO al SEXISMO!
¡Ni MACHISMO! ¡Ni FEMINISMO!
El sexismo tiene dos caras: una
el machismo y otra el feminismo. Este último término que a menudo se
asocia al nacionalsocialismo, algo así como "feminazismo". Una buena
estrategia la verdad, "si caigo yo caemos los dos". Traducido: si cae el
feminismo cae el nacionalismo (porque no nos engañemos, los medios
desinformativos no dudan en asociar al nazismo toda ideología
nacionalista).
El machismo está
en vías de extinción. Al menos entre los europeos. Cosa distinta es que
el fenómeno esté presente en nuestra tierra traída por manos forasteras,
especialmente de condición mahometana.
Mientras tanto, el feminismo (bajo el eufemismo de "igualdad" o "igualitarismo") es una potente arma ideológica en expansión.
Ciego es quien lea en mis
palabras la intención de menospreciar a las mujeres. De hecho creo que
son lo más bonito que ha creado la Naturaleza. Por eso mismo me niego a
aceptar, por mucho que hable de "igualdad" esa nefasta ideología, que el
reconocer la dignidad de la mujer sea tratarla como un objeto sexual
desalmado.
El feminismo desvirtúa su naturaleza.
¿Igualdad? Por supuesto. Aunque
para distinguirme prefiero llamarlo EQUIDAD. Equidad ante la Justicia,
teniendo en cuenta que TODA y CUALQUIER persona es, por ser persona, un
individuo con alma, vida y merecedor de la dignidad, la libertad y el
honor. Sea cual sea su origen y condición. Son sus actos y no su ser lo
que determinará si merece mejor o peor trato. Pero a priori toda persona
merece equidad ante la justicia.
No
obstante, el feminismo niega las diferencias NATURALES y EVIDENTES
entre el hombre y la mujer. Y para convencer, argumenta que estas
diferencias son reconocidas por mentes machistas.
Nada
más lejos de la realidad: la postura realmente justa es la que reconoce
diferencias naturales entre ambos sexos, la que comprende su naturaleza
y la que juzga actos sin importar su ser. El feminismo, no.
Así que, tal y como aparece en la imagen, ese es mi mensaje no para las feministas pero sí para el feminismo.